Tengo la suerte de que mi profesión se nutre de los libros; vivo de leer libros, analizarlos, mirarlos desde prismas distintos y compartir mis conclusiones con mis alumnos y con mis colegas de profesión. Un lujo, ciertamente. Para los que nos dedicamos a esto, cada día es el Día del Libro, pero no está mal que el 23 de abril sirva para seguir fomentando la lectura, en estos tiempos en los que tan importante es tener la cabeza bien amueblada para hacer frente a lo que quieren que nos traguemos.
Así pues, permitidme que añada una coletilla a mi felicitación de hoy: ¡Feliz Día del Libro y de la Lectura Crítica!